Lo mando al freezer

Bodega 1 (4) - Heladera 1 (2)

Para sorpresa de muchos, Bodega llegaba a una instancia decisiva del campeonato luego de zafar 2 veces este anio del descenso. Desde el campeonato del 2005 que el rojo y blanco no se metia en una definicion, y traia a cuestas una racha de 5 partidos invictos. Sin embargo, en los papeles, el favorito era Heladera, un equipo 10 anios mas chico, mejor fisicamente y que venia de ganar una zona complicada.

Y como era de esperarse, el partido empezo mejor para los camada 85. Bodega no mostraba firmeza atras, dudaba en cada despeje y no podia sacar la pelota del fondo de su campo. Para peor, Heladera lo tomaba a Diego en cada saque de arco de a 2 hombres, haciendo dificil emplear la clasica tactica del pelotazo, marca registrada de Bodega.

Promediando el primer tiempo, un error en la defensa le permitia a Heladera conseguir el primer gol del partido. Bodega no encontraba respuestas, estaba abajo en el marcador y las cosas parecian dificiles de levantar. Faltando un par de minutos para el cierre del primer tiempo, un tiro libre en el borde del area fue suficiente para que Manguera la ponga contra el palo del arquero y decratar el 1-1 con el cual terminaba el primer tiempo.

Bodega se iba al vestuario sabiendo que habia jugado su peor partido en mucho tiempo, habia sido dominado por su rival en casi todas las lineas, pero a pesar de eso, las cosas estaban 1-1 y el partido seguia abierto.

En el segundo tiempo, el tramite del partido cambio, se acomodo un poco la defensa Bodeguera y ya las situaciones de peligro fueron quedando de lado. Lo tuvo Keta en un mano a mano que el arquero de Heladera salio muy rapido a achicar. Y no hubo mucho mas para ninguno de los dos equipos.

Cuando ya todos pensaban en el alargue o penales, una buena jugada combinada de Heladera dejo al 5 mano a mano con Capu, que aparecio en todo su esplendor tapando un mano a mano increible, casi como si fuese un arquero de primera, que le devolvio la vida a Bodega.

El pitazo final del colegiado llego, y hubo que chequear el reglamento para ver que se hacia. A pesar de las pocas piernas que le quedaban al equipo, se decidio que un tiempo extra de 10 minutos con gol de oro era lo mas indicado.

Lejos de buscar los penales, Bodega salio con todo a definirlo y tuvo las mejores situaciones, una muy clara apenas empezado el suplementario que dio en el travesanio, que podria haber depositado al equipo en semis, pero el destino estaba empecinado en que sean los penales que definan que equipo pasaba y quien quedaba en el camino.

Fue asi que por primera vez en sus 17 anios de historia, Bodega deberia enfrentar una definicion por penales. Sorteo perdido y a empezar pateando. Hubo que decidir entonces quien pateaba y hubo firmesa en cada respuesta de los ejecutores. La terna era conformada entonces por Manguera, Diego, Panchito, Chino y Keta, en ese orden.

Primer penal de Bodega y Manguera que la manda a las nubes, estirando asi una racha de 3 penales errados consecutivamente. Pero enseguida aparecio nuevamente la figura de Capuchino, el atun del area, para atajar el primer penal y dejar las cosas como al principio.

Diego definio con tranquilidad su penal, al igual que el Heladero de turno, llego entonces el penal de Chicho, que con un disparo fuerte y abajo ponia las cosas 2-1. El tercer penal de Heladera se iba tambien a las nubes, quizas intimidado por la figura cada vez mas grande del ONE.

Hubo dudas a la hora del penal del chino, que las cayo clavandola en el angulo para sorpresa de muchos y confirmar lo que hasta ahi el solo creia, que le pegaba bien. Penal de Heladera adentro, las cosas 3-2 y con Keta para definir el partido y el pase a semis.

Otra vez el murmullo del publico se hacia presente y se escuchaba el "este le erra" de uno de las 50 personas que miraban especantes la definicion. Pero con otra buena definicion Keta metio el penal y estallo el desahogo Bodeguero, acompaniado por algunas bombas que habian quedado de la piro del principio.

"Le quise pegar a la derecha y me salio a la izquierda" fue la confesion de Jenkins despues del partido. Pero no importa, con mucho huevo y no mucho futbol, Bodega se metia nuevamente en una semi de pinazo, para sorpresa de muchos, menos para los jugadores bodegueros que confiaban plenamente en que el amor por la camiseta iba a poder mas que cualquier obstaculo.