Con oficio Bodeguero

Bodega 2 - Wallace 1

Bodega sigue de racha. Segunda victoria en igual cantidad de partidos, clasificado a cuartos de final con una fecha por jugar, serie de 10 partidos invictos, y lo que es mas importante a esta altura de nuestra carrera, la permanencia asegurada en primera al menos por un año mas. Pero no todo fue tan fácil como parece, Bodega tuvo que sufrir más de lo que se habia acostumbrado en este último tiempo y tuvo que sacar su vieja mistica y oficio para sacar adelante un partido que se le presentó mas que complicado.

Ya desde la primer jugada del partido, se supo que iba a ser una tarde larga, pelota perdida en la defensa y terminó rozando el segundo palo de Capuchino, todo un presagio de lo que iba a venir en ese primer tiempo. Wallace era un claro dominador del partido, jugaba a otra velocidad, manejaba la pelota, las llegadas, el equipo no hacia pie en ninguna de sus líneas, y las situaciones de peligro no paraban de llegar.

Los palos, Capu revocandose como cancho en un chiquero, la suerte y quién sabe que más evitaba que Wallace se ponga en ventaja, merecida desde el primer momento del partido. El gol estaba al caer y promediando la primera mitad, finalmente lo hizo. Una jugada individual desde mitad de cancha dejo a Poli Ferguson frente al One, que poco pudo hacer para evitar el gol Wallistico.

Lejos de conformarse con el 1-0, Wallace siguio atacando, y podia haber marcado al menos, dos goles mas, Bodega seguía sin hacer pie, y las caras de impotencia y preocupación estaban presentes en casi todos los miembros del equipo. A pesar del dominio de los 81, se tuvo alguna que otra llegada, lo que hacia pensar que la levantada no era imposible.

Para nuestro alivio, el referi pito el final del primer tiempo, de lo peorcito que se pudo ver en estos nuevas epocás de gloria de Bodega. La diferencia habia sido mínimo de dos goles pero el partido seguía 1-0, y todavia abierto para cualquiera.

En el entretiempo, el equipo se junto, con cara de preocupación y se escucho a alguno decir "que hacemos? nos estan bailando", se movieron algunas fichas, el chino paso de doble 5, faro a la derecha, la defensa plantada mas arriba y a ir por el empate.

Con el pitazo del colegiado, ya se vió otro Bodega en cancha, una versión mas clasica, limitada, que raspa, juega mucho al pelotazo y apreta mas los dientes antes que tirar un caño, o sea, una versión clásica Bodeguera. El equipo se paro 10 mts mas adelante, y con más amor propio que fútbol, salio a dar vuelta la historia.

Poco a poco, las piernas de Wallace también se empezaron a cansar, haciendo que la lucha sea mas pareja, y en ese terreno, fue el equipo Rojiblanco que empezó, tibiamente a inclinar la cancha. Diego era un escollo dificil de sortear para la defensa visitante, y mostraba que estaba afilado en cada pelota que tenia.

Con el clasicó juego Bodeguero, pelotazo de Manguera para el 10, y mostrando otra actitud para con la marca, el equipo comenzó a crear jugadas de peligro. Lo tuvo Diego en un mano a mano que tapo bien el arquero, y Fede con un cabezazo solo con el arquero casi vencido, pero parecia que no era nuestra tarde, y el gol no iba a llegar nunca.

En una de las pocas jugadas elaboradas, una linda asistencia de Chicho dejo mano a mano a su hermano menor, que definió con clase para poner el empate parcial. Si bien hubo caras de alivio, el equipo, motivado por el envión animico, siguio buscando el resultado.

Llegó entonces lo que 20 minutos atras era imposible de imaginar, el segundo gol bodeguero. Nuevamente Diego en una jugada individual desparramó un par de rivales, para sellar el 2-1 y gravitar en el momento que el equipo mas lo necesitaba.

Con la ventaja en sus manos, y sabiendo que por lo hecho en todo el encuentro, era un regalo mas que excesivo para el equipo, Bodega sacó el manual de como cerrar partidos. Haciendo foul cuando hacia falta, dejando todo en cada pelota, pinchando cuando por ahi se podia salir jugando, demorando minutos en cada saque de arco, haciendo a Capu una de las figuras, y pidiendo, casi implorando el final del partido.

El silbatazo final fue lo más lindo que se escuchó en el día. Bodega se alzaba con un nuevo triunfo y ya podía poner la cabeza en una nueva instancia decisiva. Merecido? Para nada, como se escucho decir a algún integrante después del partido, "que gallina nos robamos", pero el fútbol es asi, no siempre gana el que juega mejor o mas lindo.

Bodega es un equipo con oficio, con experiencia, que conoce sus limitaciones y explota al máximo sus virtudes, que sabe a que juega y a que no, y que por sobre todo las cosas, tiene mistica, esa que no se ganá toqueteando la pelota solamente, sino después de años y años de batallar juntos por la misma camiseta.

El primer objetivo, clasificar y lograr la permanencia, ya se logró.